Esta enfermedad afecta principalmente a los niños. Se trata de vegetaciones que se hipertrofian, se inflaman y causan una obstrucción nasal que obliga al niño a respirar por la boca.

Por lo general, el niño que la padece tiene una sensibilidad que le permite sentir intensamente los acontecimientos antes de que ocurran. Muy a menudo, de una manera consciente o no, siente esos sucesos antes que las personas interesadas o involucradas.

Por ejemplo, puede sentir mucho antes que sus padres que algo no marcha bien entre ellos. Su reacción es bloquear su percepción para no sufrir. También se abstiene de hablar de ello, por lo que vive sus temores en el aislamiento. La obstrucción nasal representa las ideas o las emociones que el niño se guarda por miedo a no ser comprendido.

Este niño cree que está de más, o que no es bienvenido. Incluso puede pensar que es la causa de los problemas que percibe a su alrededor. Le beneficiaría preguntar a quienes lo rodean si lo que piensa de sí mismo es exacto.

También debe expresarse más, aceptando que el hecho de que los demás no lo comprendan no quiere decir que no lo quieran. De un modo general, un adenoma es un tumor benigno que se encuentra en una glándula.

Como cualquier tumor, esto procede de un golpe emocional que se ha solidificado en la parte del cuerpo que está conectada con el golpe emocional, trátese del páncreas, el hígado, un pecho, un riñón, la próstata e incluso las glándulas endocrinas. Acepto los sucesos pasados, para permitirme ir hacia delante, con plena confianza.

La adenopatía se caracteriza por un aumento del volumen de los ganglios linfáticos y puede proceder de una inflamación, un tumor o una infección. Ya que los ganglios del sistema linfático actúan como pequeños riñones del sistema linfático, esto significa que vivo un estrés o un golpe emocional vinculado a miedos en el plano afectivo.

Así es que me siento bloqueado, cogido en ese plano. La región afectada me indica con más precisión el aspecto de mi vida que está tocado, trátese del tórax, el abdomen, el cuello, la axila, la ingle. ¡Tengo ventaja en desarrollar mi autonomía y mi confianza para tomar mi vida en mano!

La enfermedad de las vegetaciones adenoídes, comúnmente llamadas vegetaciones es una infección afectando más particularmente a los niños. Esto se traduce por la hipertrofia de las amígdalas de la faringe situadas detrás de las fosas nasales provocando una obstrucción al nivel de la nariz, que obliga así al niño a respirar por la boca. Teniendo una sensibilidad muy grande y dotado/a de una intuición muy desarrollada, bloqueo mi nariz para evitar oler las cosas que me dañan. Puede ser un detalle muy común y anodino al cual daré proporciones y una amplitud elefantesca. A veces me sucede sentir que no tengo mi lugar en esta familia; vivo rabia y me siento rechazado. Tensiones o conflictos familiares son propicios a la aparición de las vegetaciones. Acepto tomar el lugar que me corresponde en la armonía, participo mis sentimientos y reconozco los beneficios de la intuición.