Este problema ocular es ocasionado por una variación en la curvatura de la superficie del ojo, lo que da como resultado una visión distorsionada.

El astigmatismo revela problemas entre la vida interior y la vida social. Este problema lo experimenta la persona que no ve las cosas de la misma manera para ella que para los demás. Tiene dificultad para ver las cosas de manera objetiva. El hecho de que su manera de pensar no esté de acuerdo con el entorno le ocasiona conflictos interiores.

Le cuesta más trabajo aceptar un cambio proveniente de otro que uno surgido de sí mismo. Le resulta difícil ver que un cambio es adecuado y positivo –si éste le es impuesto por otra persona–. Sin embargo, si este cambio es idea suya, se adaptará sin problemas. Suele ser una persona que se siente herida con mucha facilidad.

¿De qué tienes miedo? ¿Qué puede ocurrir si te permites ver las cosas de frente, de una manera más objetiva, con los ojos de los demás? Es posible que de niño decidieras no dejarte influir por los demás y te dijeras que en el futuro verías la vida siempre a tu modo. Esta decisión pudo haber sido benéfica para ti en ese momento de tu vida, pero en la actualidad no lo es, al menos, no siempre.

Concede a los demás el derecho de estar en desacuerdo contigo, sin que por ello pierdan valor ante tus propios ojos. Esto eliminará una gran cantidad de conflictos con quienes te rodean, lo cual mantendrá tu paz interior. El astigmatismo es un defecto de esfericidad (que se refiere a curvatura) de la córnea o del cristalino.

La curvatura vertical de la córnea es más importante que la curvatura horizontal o inversamente. Esta malformación denota generalmente un miedo a mirarme de frente, tal como soy. Una mala coordinación de los ojos puede significar que mi modo de actuar y mis pensamientos están en desacuerdo con mi entorno, causando así conflictos interiores. Puedo querer crearme una realidad diferente e intentar liberarme de la influencia de mis padres o de cualquier otra persona que encuentre abusiva.

Frecuentemente confrontado con la rabia, la ira o miedos durante mi juventud, mis ojos han conservado esta expresión de miedo y los músculos que rodean el ojo se han quedado en estado constante de impacto. Mis ojos podrán estar irritados si lo que veo fuera o dentro me irrita.

El astigmatismo también puede ser el resultado de una gran curiosidad. Mi necesidad insaciable de verlo todo “desgastó” mis ojos. De este modo, mi cuerpo me dice que tome el tiempo necesario para apreciar las cosas. También esto puede significar que tengo interés en reconocer mi propia belleza, el ser magnífico que soy.