Los dos ovarios son las glándulas sexuales de la mujer (como los testículos en el hombre), que secretan las hormonas sexuales femeninas y forman los óvulos que se van a fecundar. Los problemas inherentes al ovario son: DOLORES, INFLAMACIÓN (OVARITIS), CÁNCER y ABLACIÓN.

Los ovarios son glándulas que unen al cuerpo físico de la mujer con su chakra sagrado. Este chakra está relacionado con la energía del poder de crear de la mujer. Las dos funciones de los ovarios (la reproducción y la feminidad) resultan afectadas en la mujer que sufre en uno de ellos o ambos. Su cuerpo le dice que no establece un buen contacto con su capacidad de crear. Está demasiado en el «no soy capaz». Se preocupa fácilmente cuando llega el momento de crear algo por sí misma, sobre todo porque es mujer. Incluso puede tener problemas para comenzar algo.

Tus ovarios te dicen que es el momento de que comiences a creer en «yo puedo por mí misma». No porque seas mujer puedes menos. Aquella que se disminuye por serlo, también tiene problemas de menstruación. A menudo intenta probarles a los hombres lo que puede hacer, mientras que por dentro no se cree tan capaz.

No olvides que para crear un hijo se necesita un hombre y una mujer. Lo mismo se aplica a ti: para crear tu vida se necesita el poder de tu hombre interno y el de tu mujer interna. Al saber que puedes confiar en el poder creador de tu hombre interior, podrás darle poder a tu mujer interior para que cree a su antojo. Para lograrlo debes confiar en los hombres con los que convives.

Confía sobre todo en tus ideas y en tu intuición. Los problemas de los ovarios indican un profundo conflicto en cuanto al hecho de ser mujer, a la expresión de mi feminidad, o al hecho de ser madre. Puedo también haber dejado de lado el lado creativo que está presente en mí.

Es como si me “cortase” de una parte de mí – misma, porque los ovarios son el principio de la creación de la vida y se sitúan en la pelvis, que es la región en donde puedo dar a luz a un niño, pero también a nuevos aspectos de mí – misma, ahí en donde puedo descubrirme otra vez. Puede pues existir un conflicto interior frente a la creación y al descubrimiento de mi propia vía.

Un quiste de los ovarios indica la acumulación de energía emocional o sentimientos contrarios, vinculados con la energía de los ovarios. En cuanto al cáncer de los ovarios, se puede desarrollar después de un acontecimiento en que viví la pérdida de un ser querido. El paralelo al cáncer de los ovarios en el hombre es el cáncer de los testículos.

Frecuentemente el ser querido es uno de mis hijos muerto en un accidente, después de una enfermedad o de un aborto. Puede tratarse de una persona con quien no tengo vínculos sanguíneos pero que “amo tanto como si fuera mi hijo”.

El sentimiento de pérdida puede vivirse con un elemento abstracto como por ejemplo: “Desde que tiene este nuevo trabajo, mi marido ya no está en casa, vuelve tarde, ya casi no nos hablamos, siempre tiene su trabajo en la mente. ¡He perdido a mi marido! Si esto sigue así, el trabajo destruirá nuestro matrimonio…” Por lo tanto, “he perdido” al hombre que conocía antes y con quien era feliz, lo cual hoy ya no soy.

Puede tratarse de la pérdida de un proyecto que amaba y que abortó. Y de hecho, si era el instigador de dicho proyecto, cuando hablaba a los demás, se trataba de “mi bebé”. Cualquier sea la situación, es importante que acepte todos los sentimientos que me habitan, que los exprese para que mi herida interior pueda curar y que pueda girarme hacía el futuro con una mirada más positiva y llena de proyectos por realizar.

Ver más acerca de su interpretación emocional.