Esta enfermedad comienza por simples tics nerviosos y progresa hasta llegar a generar movimientos complejos y múltiples, que incluyen tics respiratorios y vocales.  Esta afección se manifiesta en alguien que se siente controlado e invadido y tiene un miedo terrible a perder el control y a dejarse invadir.

Es muy probable que en su infancia esta persona haya sentido que uno de sus progenitores (generalmente el del sexo opuesto) era muy controlador, mientras el otro estaba agarrado y controlado.

También pudo haber vivido la experiencia de perder el control, una situación que le resultó difícil. Esta persona está a menudo enojada y posee un sentido muy crítico. Oculta su vulnerabilidad porque quiere dar la impresión de ser fuerte.

Es muy importante que te concedas el derecho a ser una persona sensible y vulnerable. Aun cuando hayas perdido el control cuando eras niño, esto no se repetirá siempre. Por otro lado, un ejercicio de perdón con ambos progenitores sería una ayuda preciosa para que lograras perdonarte a ti mismo (véase las etapas del perdón).

Estos tics pueden ser como movimientos en el cuerpo o bien vocales, con la emisión de ruidos o palabras, que van desde la repetición de frases, groserías, sílabas o letras.

¿Qué conflicto emocional estoy viviendo?
Si soy menor de 14 años, el conflicto emocional no es mío, es de alguno de mis padres. O bien, sí es mío porque algo pasó en mi nacimiento.
Si soy mayor de 14 años, el conflicto emocional sí es mío y debo revisar lo vivido de un año para acá.
Si ya descubrí que el conflicto no es mío, debo hacer mi árbol genealógico y buscar quién o quiénes en la familia, tuvieron estos conflictos.

Conflicto Emocional de «Depresión + Peligro»:
– Ver llegar una situación o persona peligrosa e intuir, que detrás de mí, viene otra.
– Sentir que no hay manera de escapar de una situación.
– Haber tenido que poner cara «de malo» para repeler una agresión, por haberme sentido incapaz de defenderme físicamente.
– Haber tenido que «dar la cara por alguien» y recibir la agresión.

Basándonos en el tipo de tic nervioso, analizar qué aspecto de mi vida está afectado, ya que el cerebro genera dicho movimiento o expresión para «defenderme».
– Tengo que salvar mi vida.
– Tengo que pedir ayuda.
– Estoy en peligro y voy a morir.
– Nadie me escucha, tengo miedo, ahí viene el que va a dañarme.

Conflicto Emocional de querer salvar la cabeza:
– Historias en el árbol genealógico de muertes por ahorcamiento, estrangulación, cordón umbilical enredado.
– Historias de bebés nacidos muertos, que no lloraron.
– Historias de exámenes médicos dolorosos o situaciones médicas dolorosas en niños muy pequeños, que no pueden expresar su dolor o molestias.

Conflictos Emocionales con Tics específicos:
Si muevo la mandíbula:
– Me han pedido que me calle.
– No me dejan hablar.
– No me dejan opinar.

Si muevo la lengua o me muerdo la lengua:
– Siempre me dicen que cuide lo que digo.
– Me impiden decir lo que pienso.
– Me dicen que lo que digo está mal. Si me coloco en posición fetal:
– Debo volver al lugar seguro, escapar de aquí.
– Aquí estoy seguro.
– Aquí no pueden lastimarme.

Si muevo el cuello:
– Debo ver quién me puede atacar por detrás.
– Debo voltear, el peligro viene tras de mí.
– Alguien quiere estrangularme.
– Alguien me estrangula.

Si presento Tos o Garraspera:
– Alguien me toma por la garganta.
– Alguien me ahorca.

La sintomatología del Síndrome de Tourette, es de las más simbólicas en Biodescodificación.

Representa en la mayoría de las ocasiones un hecho vivido y heredado del árbol, en el que nos hemos sentido en peligro e incapaces de pedir ayuda.

Y pueden ser cosas muy sencillas y simples como haber estado a punto de ser atropellado y ver cómo el coche, frena a unos centímetros de mí. O haber estado a altas horas de la noche y sentir que un extraño me sigue, que me a asaltar y no puedo correr ni gritar.

¿Cuál es la emoción que no he expresado?
– Que tengo o tuve muchísimo miedo de morir, de ser atacado, etc..
– Que fui o soy incapaz de pedir ayuda.
– Que pude haber muerto, que temí por mi vida.

¿Cómo lo soluciono?
Identificando qué situación o qué persona me hizo sentir tanto miedo que creí morir.
– Haciendo mi árbol genealógico y buscando historias relacionadas con estos conflictos, para entender que no es mi drama y liberarme.
– Expresando en voz alta, todo el miedo que siento o sentí en la situación.
– Expresando en voz alta lo incapaz que me sentí de pedir ayuda.
– Expresando en voz alta que me libero de ser incapaz de pedir ayuda o de defenderme para salvar mi vida y que a partir de hoy lo haré.
– Expresando que soy capaz de pedir ayuda, que soy capaz de defenderme y de salvar mi vida.