Género de platelmintos parásitos de la clase Cestoda, conocidos vulgarmente como tenias o solitarias, que causan dos tipos de enfermedades parasitarias, según sean producidas por su fase adulta o por su fase larvaria.

Se llama teniasis a la que ocurre por la presencia de sus formas adultas, cuando se alojan en el intestino del huésped definitivo, y cisticercosis o cenurosis a la producida por sus formas larvales, intermedias o juveniles, al afectar a los hospedadores intermediarios en sus tejidos u órganos internos.

Las 32 especies de Taenia reconocidos1 parasitan a diversos animales, pero sólo T. saginata y T. solium causan enfermedad en los humanos.

En Busca de una Interpretación:
La tenia es un gusano parasitario que se encuentra en el intestino y que puede tener algunos milímetros o varios metros de largo. También llamado gusano solitario, la tenia se desarrolla en una persona que tiene la sensación que se le imponen ideas o modos de pensar contrarios a las suyas.

Me siento triste e incomprendido, abusado y sucio. Puedo tener la sensación que “parásitos” merodean alrededor mío. Como que tengo dificultad en afirmarme y a decir que no. Me dejo “robar” mi energía. Las preocupaciones, las penas que tengo dificultad en soltar van a favorecer también la aparición de la tenia.

Este gusto amargo hace difícil mi digestión. Mis pulmones dejan pasar una energía corrompida y se instalan gusanos parásitos, conllevando irritación y nerviosidad. Para curar mi interior, cuido mis ideas, dejo lugar al placer y a la alegría. Tomo el lugar que me corresponde en la vida.

Morfología
Fase preadulta: En su forma adulta, como todo platelminto, son «gusanos» aplanados a lo ancho, como una cinta, con ausencia de cavidad general, recubiertos por una estructura sincitial llamada tegumento, a diferencia de la cutícula de los nematodos. Su longitud varía, según las especies, desde los 50 cm a más de 10 m.

Como los demás cestodos, carecen de tubo digestivo, su cuerpo es segmentado y son parásitos digestivos de vertebrados e invertebrados. Son hermafroditas, con poros genitales irregularmente alternos en cada proglótide.

Como otros miembros del orden Cyclophyllidea poseen los característicos órganos de fijación, llamados ventosas, cuatro en total, como parte del escólex o segmento anterior del parásito, que tiene también un rostelo que puede presentar una o varias hileras de ganchos (tenias armadas), o no estar presentes (tenias inermes).

Estos órganos, ventosas y garfios, son los que les permiten fijarse a las paredes del intestino de su hospedador.

Los síntomas pueden ser muy leves o ausentes durante mucho tiempo 3 , por lo que el paciente infectado no sospecha la infección hasta pasados años permitiendo al parásito alcanzar grandes tamaños.

Fase intermedia
La forma intermedia, mal llamada larva, conocida también como juvenil o larval, puede ser del tipo cisticerco o cenuro, también llamado multiceps. El primero es una vesícula relativamente pequeña, que contiene en su interior un solo escólex, el cenuro es también una vesícula con contenido líquido, pero de mayor tamaño y con la presencia de gran cantidad de escólices. Están formados por una doble membrana, la externa continua, y la interna que se invagina hacia el interior para formar los escólices.

Fuente de infección
Las vías de contaminación son la ingestión de alimentos contaminados con los huevos de Taenia. Puede ocurrir también por auto infección, es decir, una persona ya contaminada ingiere los huevos por no lavarse las manos adecuadamente.

La contaminación con huevos de Taenia solium se conoce como cisticercosis y cuando es elevada pueden distribuirse por todo el cuerpo a través del sistema circulatorio y llegar al cerebro produciendo lesiones cerebrales y oculares provocando convulsiones y ceguera.

Una señal segura de que existe la tenia en el intestino es la expulsión de fragmentos de su cuerpo (proglótidas grávidas o un trozo de estróbilo) que ella usa para reproducirse. Para provocar la salida de la tenia, es necesario tratamiento médico. Principalmente el uso de praziquantel asegura la eliminación completa del parásito. Un indicador de éxito del tratamiento es la eliminación del escólex de la tenia.