El psicoanálisis (del griego ψυχή [psykhé], «alma» o «mente», y ἀνάλυσις [análysis], «análisis», en el sentido de examen o estudio) es una práctica terapéutica y técnica de investigación,1 2 o una pseudociencia al declararse como ciencia 3 (véase críticas del psicoanálisis) y fue fundada por el neurólogo austríaco Sigmund Freud alrededor de 1896.4 A partir del psicoanálisis se han desarrollado posteriormente diversas escuelas de psicología profunda o de orientación dinámica y analítica. Asimismo, la teoría ha influido sobre muchas otras escuelas psicológicas y de terapias no necesariamente psicoanalíticas

El psicoanálisis es la ciencia del lenguaje habitada por un sujeto.

Sigmund Freud (1856 – 1939) es el creador del psicoanálisis, ciencia que ha tenido tanta influencia, no sólo en el campo de la psicopatología y la vida anímica, sino también en las artes, la filosofía y las demás ciencias, y en la propia vida de los hombres.

El psicoanálisis es un método terapéutico y una teoría: la teoría del inconsciente.

Como teoría, Freud descubre y formula el funcionamiento del psiquismo humano y da cuenta de los mecanismos psíquicos implicados tanto en la producción de enfermedad como en la producción de salud o normalidad.

El psicoanálisis es la ciencia del lenguaje habitada por un sujeto.

Sigmund Freud Sigmund Freud (1856 – 1939) es el creador del psicoanálisis, ciencia que ha tenido tanta influencia, no sólo en el campo de la psicopatología y la vida anímica, sino también en las artes, la filosofía y las demás ciencias, y en la propia vida de los hombres.

El psicoanálisis es un método terapéutico y una teoría: la teoría del inconsciente.

Como teoría, Freud descubre y formula el funcionamiento del psiquismo humano y da cuenta de los mecanismos psíquicos implicados tanto en la producción de enfermedad, (problemas psíquicos, problemas físicos y/o sociales), como en la producción de salud o normalidad.

El psicoanálisis tiene como objeto de conocimiento el inconsciente. Aunque existía el término, nada tiene que ver con el inconsciente del romanticismo u otras formas de inconsciente. Se trata de una producción nueva. Una vez producido el concepto de inconsciente, se redefinen todos los demás conceptos o nociones.

El inconsciente freudiano, tal como lo define Freud, es inaccesible a la conciencia. Un contenido inconsciente jamás podrá hacerse consciente, salvo a través de la interpretación psicoanalítica. No es que hablando y hablando (asociando) voy a dar con mi deseo inconsciente, sino que hace falta la interpretación, es decir, la intervención o presencia del psicoanalista. La interpretación es algo nuevo, algo que no estaba antes. Y lo que se va a interpretar, va a ser siempre el deseo inconsciente. Deseo inconsciente sexual infantil reprimido. La interpretación produce este deseo inconsciente.

Sexual, a partir del psicoanálisis será, en su sentido más amplio, el habla. Infantil, será la sexualidad infantil, la sexualidad incestuosa. Y reprimido, es un concepto que da cuenta de la complejidad del psiquismo humano, que no sólo es consciente e inconsciente (primera tópica), sino que en 1923, con El Yo y el Ello, (segunda tópica), se complejiza y será un aparato donde parte del Yo, además del Ello, será inconsciente y habrá, además, una tercera instancia que es el Superyó.

El método psicoanalítico es la interpretación. Más adelante, en 1937, Freud dirá que el método es de interpretación-construcción. Una construcción en psicoanálisis, es una secuencia de interpretaciones.

Técnicas utilizadas en la PsicoanálisisUna vez producido el concepto de inconsciente, se desprende de él, el método de interpretación. Con este método, en el contexto de la sesión psicoanalítica, voy a producir el deseo inconsciente.

La técnica, inherente a este método, es la asociación libre y la transferencia. Hay que pensar todas estas cuestiones, articuladas, no es la una sin la otra. Si falta alguna, ya no es.

La asociación libre es todo lo que el paciente produce en la sesión. Cuando asiste la primera vez se le pedirá que asocie libremente, que diga todo lo que se le ocurra, sin omitir aquellas ocurrencias que puedan parecer inconexas o faltas de sentido, incluso lo más nimio o lo que parezca no tener importancia o parecer ridículo. La asociación libre es el trabajo del paciente.

La transferencia da cuenta de la relación que se produce espontáneamente entre el paciente y el psicoanalista. Es algo inherente a toda relación humana, pero sólo el psicoanálisis lo emplea como elemento de su técnica. La transferencia es a condición de no ser utilizada. Surge espontáneamente, dirá Freud, y es un elemento importante de su técnica.

Freud publica en 1900 La Interpretación de los sueños. Por este hecho, Freud pertenece a la historia de las ciencias, y Lacan, pertenece a la historia del psicoanálisis. Una ciencia no tiene edad, una vez que se produce no cesa de existir, se hace necesaria, transforma la realidad. Desde Freud, ya no podemos pensar que la conciencia es el centro de nuestras vidas, sino que en todo acto humano, hagamos lo que hagamos, estemos o no de acuerdo, nos guste o no nos guste, habrá siempre participación inconsciente.

El descubrimiento de Freud es el funcionamiento del psiquismo humano. Freud descubre el mecanismo psíquico y su funcionamiento que se da tanto en lo patológico, como en los actos normales. Con el intento de generalizar su descubrimiento, emplea los sueños. Lo importante no es el sueño, sino lo que digo de él, su interpretación.

El ser humano siempre habla. Habla no sólo cuando habla, sino que habla todo el tiempo, habla también con el cuerpo, (histeria, enfermedades psicosomáticas), cuando sueño, con los lapsus, el chiste, los olvidos, cuando callo, cuando me enamoro, cuando trabajo, cuando triunfo, cuando fracaso.

Para el psicoanálisis, todas estas producciones humanas son frases. Frases para quien pueda escuchar.

Por eso que a partir del psicoanálisis, el ser humano, podríamos decir que ya no habla, sino que es más bien, hablado. Esto quiere decir que el sujeto se produce en función del lenguaje y todo lo que le va a pasar al sujeto, le va a pasar en función del lenguaje.

Lo vivido, lo sentido, lo soñado, es según cómo lo interpretamos, qué es lo que decimos de esos hechos. La realidad la interpretamos según nuestra ideología y según nuestro deseo, que no son lo que uno cree conscientemente, sino que mi verdadero deseo y mi verdadera ideología son siempre inconscientes.

De esa complejidad que es el ser humano, da cuenta el psicoanálisis.

El psicoanálisis es una terapia, pero también es una nueva manera de pensar el ser humano. A partir de Freud, el ser humano, además de hablar tiene deseo inconsciente producido por la interpretación. Por eso que es la ciencia del lenguaje, habitada por un sujeto. Todo en el ser humano tiene relación con sus procesos inconscientes.

Paola Duchên – Psicoanalista

Bibliografía:
La Interpretación de los Sueños. Sigmund Freud. Biblioteca Nueva.
Freud y Lacan – Hablados –. Miguel Oscar Menassa. Editorial Grupo Cero.

https://www.youtube.com/watch?v=RfKq9Hloy3A

Compilado por: Ana Gonzalez  01/12/2016  15:35pm
Fuentes: SaludTerapia. Wikipedia