Son proposiciones acerca de nuestras observaciones que podemos compartir con los demás gracias a nuestra tradición y estructura biológica común. En función de lo que podemos observar es que describimos la realidad. Las afirmaciones se hacen en un espacio de DISTINCIONES previamente establecido (sería el CONTEXTO, para entender el texto) Por ej.: el esquimal y las distinciones de blanco…

Las afirmaciones pueden ser VERDADERAS O FALSAS sólo bajo condiciones sociales e históricas determinadas (lo cual define la capacidad de distinción) y predicciones cuando son acerca del futuro. Las afirmaciones no verificables se llaman indecisas o imprecisas.

Normalmente hablamos de las afirmaciones en tiempo presente. Y puede haber afirmaciones acerca del pasado, solo que a veces resulta más dificil probarlas.

CADA VEZ QUE EJECUTAMOS UN DISTINGO LINGUSTICO ADQUIRIMOS UN COMPROMISO Y DEBEMOS ACEPTAR LA RESPONSABILIDAD SOCIAL DE LO QUE DECIMOS.

El hablar nunca es un acto inocente. El compromiso que asumimos cuando hacemos una afirmación es el de adecuación al estado del mundo, es decir con la veracidad (compartida por la comunidad de oyentes de la cual somos parte).

Las afirmaciones pueden ser también RELEVANTES o IRRELEVANTES, según la relación que guarden con nuestras INQUIETUDES. La distinción de inquietud presupone que existe un algo que nos lleva a actuar, a intervenir: las acciones no se justifican por sí mismas. La inquietud (es decir lo que explica por qué se actúa) siempre será motivo de interpretación (ejemplo típico: el móvil en un crimen).

Compilada por Beth Ludojoski – lunes, 25 de marzo de 2013, 08:09
Con aportes de Fabián Sorrentino.